viernes, 20 de febrero de 2009
El Secretario General del Sínodo de los Obispos, Mons. Nikola Eterovic, señaló que la lectura de la Palabra de Dios debe realizarse sin caer en "el subjetivismo, la arbitrariedad o el fundamentalismo".
Así lo expresó el Prelado vaticano en la presentación del libro de Mons. Lorenzo Leuzzi titulado "La Palabra en las palabras: Del biblismo al realismo de la fe", presentado en Roma, texto en el que se hace algunas reflexiones sobre los discursos del Papa Benedicto XVI durante el último Sínodo sobre la Palabra de Dios celebrado en el Vaticano en el mes de octubre.
En la presentación, tras precisa que "el encuentro personal del fiel con la Palabra de Dios tiene lugar en el ámbito de la comunidad eclesial", el Arzobispo recordó que el Papa Benedicto se refirió a la "necesidad de una exégesis católica que tenga en cuenta la dimensión humana y divina de la palabra revelada".
Se trata de reflexiones, prosiguió, que han orientado el trabajo de los padres sinodales, "que sobre este tema estaban buscando una justa posición, acogiendo todo el bien que viene de la exégesis moderna, pero insertándola en la Tradición de la Iglesia".
Para el Prelado, este tema fundamental para la vida y la misión de la Iglesia "no tiene que ver solamente con los especialistas, exégetas o teólogos; sino también con todo los cristianos que deben tener una justa inteligencia de la Palabra de Dios. Por ejemplo en la práctica de la lectio divina, el primer grado requiere la lectura (lectio) y entonces la aplicación del método histórico crítico, también en una mínima medida, indispensable para no caer en el subjetivismo, en la arbitrariedad o en el fundamentalismo".
Así lo expresó el Prelado vaticano en la presentación del libro de Mons. Lorenzo Leuzzi titulado "La Palabra en las palabras: Del biblismo al realismo de la fe", presentado en Roma, texto en el que se hace algunas reflexiones sobre los discursos del Papa Benedicto XVI durante el último Sínodo sobre la Palabra de Dios celebrado en el Vaticano en el mes de octubre.
En la presentación, tras precisa que "el encuentro personal del fiel con la Palabra de Dios tiene lugar en el ámbito de la comunidad eclesial", el Arzobispo recordó que el Papa Benedicto se refirió a la "necesidad de una exégesis católica que tenga en cuenta la dimensión humana y divina de la palabra revelada".
Se trata de reflexiones, prosiguió, que han orientado el trabajo de los padres sinodales, "que sobre este tema estaban buscando una justa posición, acogiendo todo el bien que viene de la exégesis moderna, pero insertándola en la Tradición de la Iglesia".
Para el Prelado, este tema fundamental para la vida y la misión de la Iglesia "no tiene que ver solamente con los especialistas, exégetas o teólogos; sino también con todo los cristianos que deben tener una justa inteligencia de la Palabra de Dios. Por ejemplo en la práctica de la lectio divina, el primer grado requiere la lectura (lectio) y entonces la aplicación del método histórico crítico, también en una mínima medida, indispensable para no caer en el subjetivismo, en la arbitrariedad o en el fundamentalismo".
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